Esto de hacer algo bueno por alguien sin ninguna razón cada ves nos gusta más. Es un gran “feeling” que todos debemos de tratar. Esta semana Cascabel se lanzó a sorprender a gente pagandoles su cena. La gente obviamente sorprendida dijo “si!” “deveras?” “porque?” pero al final aceptaron.
Dato curioso, en esta ocación, un radioescucha nos llamó a cabina para contarnos que Cascabel le había comprado cena a un parente de ella. Nos contó que su pariente al acabar su cena pasó a un restaurante a hacer lo mismo! Y es que de eso se trata, de hacer una cadenita de cosas positivas que podemos hacer por otros. Que siga esa cadenita!